La Embajada de México, la Cámara Chileno Mexicana y SUBREI sostuvieron una reunión para conocer las actividades con motivo de la conmemoración de los primeros 25 años, de entrada en vigor, del exitoso TLC entre Chile y México.
Carlos Iván Mendoza, Jefe de Cancillería de la Embajada de México, fue el anfitrión, especialmente invitado Rafael Marín, Jefe del Departamento de América del Norte, América Central y el Caribe de SUBREI, y las ejecutivas de CICMEX.
Desde el año pasado, se planteó la necesidad de abordar una modernización del tratado, ya que en estos 25 años han ocurrido bastantes cambios que se vuelve menester darles respuesta.
Este proceso de modernización se trabajará en reforzar dos pilares. Por parte de México, se abordará la promoción y el crecimiento destinados especialmente a las pequeñas y medianas empresas (Mipymes). En el caso de Chile, se pondrá un énfasis particular en el desarrollo del comercio con un enfoque de género. El componente de género, se alinea con una de las premisas fundamentales de ambos gobiernos, que buscan respaldar e incentivar la participación activa del sector femenino en los sistemas productivos.
Asimismo, durante la reunión se exploraron los beneficios que el actual TLC bilateral ha aportado a ambas naciones. En la actualidad, este tratado se erige como el más utilizado por cientos de empresas que se dedican a la importación y exportación entre ambos países. Esta realidad evidencia la necesidad imperante de revisar y actualizar este instrumento a medida que el comercio internacional continúa expandiéndose y ganando relevancia. Este escenario demanda que Chile y México aborden de manera constante estrategias para fortalecer esta alianza comercial.
Los objetivos que orientan la consolidación de los cambios propuestos para estos 25 años radican en el reconocimiento mutuo de que ambos países comparten objetivos comunes, especialmente en consideración a los beneficios que ha aportado el TLC desde su puesta en marcha en 1999. La revisión y actualización del tratado es una necesidad estratégica para asegurar su vigencia y relevancia en el contexto del crecimiento continuo y la evolución dinámica del comercio internacional.
Es una oportunidad para modernizar el TLC entre México y Chile en el área de la economía creativa o economía naranja, en la que ambos países exhiben desarrollos notables importantes para el comercio bilateral.